miércoles, 29 de octubre de 2008

El funesto ensueño “progre”

La posibilidad de que Barack Obama gane las elecciones del próximo 4 de noviembre en EE UU tiene alterados a los “progresistas” de medio mundo: parece la cosa más lógica que los estadounidenses elijan al candidato preferido por todos los enemigos de su país. No obstante, puede que esos sueños no se cumplan del todo, aunque ciertamente la alegría de esa gente debería ser para los demás un motivo de angustia.

Las cuentas reales
Es muy llamativo que diversos medios fuera de EE UU anunciaran que Obama aventajaba a McCain en 14 puntos, siendo una encuesta entre muchas que aparecen cada día y que si bien dan por lo general una clara ventaja al senador por Illinois, ésta no ha llegado nunca a ser en promedio siquiera de 8 puntos. Los periodistas forman parte de esas profesiones por las que optan las clases sociales agrupables bajo la noción de “progresía”. La verdad es que esas encuestas dicen muy poco sobre las posibilidades reales de los candidatos, pues si el apoyo a Obama en California, el estado más importante (55 votos electorales) sube hasta los 40 puntos de ventaja, daría lo mismo que fuera sólo de un punto en la elección real, pero la encuesta nacional resultaría alterada. La elección depende de unos cuantos estados en disputa: Florida, Ohio, Missouri, Colorado, Virginia, Nevada y Carolina del Norte; los demás difícilmente variarán. Y el triunfo de Obama es menos seguro de lo que se puede inferir de leer resultados de encuestas nacionales, si pierde en todos los estados mencionados, daría lo mismo que la votación nacional le diera ventaja. Y las encuestas no son la elección, de hecho, el voto por Obama es más “mostrable”, mientras que el que lo rechaza por racismo no aparece en las encuestas.

Después de Bush
Se podría empezar por una experiencia corriente para cualquier colombiano: todos hemos encontrado muchas veces a personas que experimentan arrebatos de odio cada vez que se habla de los disidentes cubanos. ¿Aceptaríamos los testimonios de esa clase de personas como pruebas a favor o en contra del régimen comunista de la isla? Para mí son pruebas indudables de la condición moral de los colombianos, es seguro que en países en que hay tanta gente así se terminará secuestrando niños y poniendo bombas. Lo mismo se puede decir de Bush: es muy difícil evaluar realmente su presidencia porque quienes lo hacen a diario son los habituales enemigos de EE UU. Tal vez quede como un buen presidente, de otro modo no despertaría tanto odio. Nadie negará que hubo errores en la intervención en Irak, lo que de momento pone en duda la inmensa mayoría de los iraquíes es que constituya la atrocidad que los chavistas y los paniaguados de Santodomingo presentan. Sencillamente hay un cambio en la realidad de la región, ya no está el mayor criminal de la historia árabe, es lógico que lo echen de menos los admiradores de su émulo caribeño. De hecho, ¿alguien recuerda lo que se decía de Reagan y la Iniciativa de Defensa Estratégica? Figúrense, no gustaba a los prosoviéticos y a los becados en Cuba...

¿Hasta dónde llegaría Obama?
Lo cierto es que Obama recauda votos entre quienes desaprueban la intervención en Irak y la política exterior agresiva de Bush, pero eso no necesariamente quiere decir que su política vaya a ser blanda. Podría retirarse de Irak porque la guerra ya la ha ganado el gobierno legítimo apoyado por los aliados, pero nadie debe esperar que se rinda en el caso de Afganistán ni que ceda a las presiones rusas sobre la periferia del antiguo imperio soviético. Respecto a los países con los que EE UU tiene diferencias, nadie debe entender que la voluntad de “conversar” con Chávez y Ahmadineyad vaya a significar una actitud complaciente con ellos, pero la mera determinación de conversar puede envalentonarlos. Según
Ramón Pérez Maura, la conversación con Zapatero incluirá la exigencia de enviar más tropas a combatir a Afganistán.

El “gigante dormido”
En la segunda guerra mundial murieron en Europa un millón de jóvenes estadounidenses, por no hablar de cerca de sesenta millones de europeos. ¿Qué habría pasado si desde antes de la invasión alemana a Polonia se contara con la determinación manifiesta de defender la soberanía de ese país por parte de los estadounidenses, aparte de los británicos y franceses. Más aún, ¿qué habría pasado si la determinación de contener a Hitler se hubiera manifestado antes, cuando se anexionó Austria o cuando destruyó Checoslovaquia. Probablemente se habrían evitado muchas desgracias, pero primó por una parte esa actitud cómoda de quienes prefieren desentenderse de lo que va a pasar: por una parte los simpatizantes de Hitler se dedicaban al pacifismo (sobre todo en Europa, pero también en EE UU), por la otra muchos cínicos esperaban que los alemanes y rusos se mataran entre ellos, o que la agresión alemana acabara con el régimen soviético, al precio de “tolerarlo”. Más aún, ¿qué habría pasado si unos Estados Unidos agresivos hubieran impuesto, en alianza con los británicos y tal vez con la Sociedad de Naciones, una intervención en España para forzar un armisticio y un plebiscito sobre un programa político que incluyera nuevas elecciones? Los nazis y los comunistas contaban con España para hacer realidad sus sueños, unas potencias aliadas indolentes fueron sus cómplices. Es lo mismo ahora, los chavistas y los islamistas, amén de los expansionistas rusos, esperan unos EE UU acobardados y contenidos para sacar adelante sus proyectos.

Carter y Clinton
Muchas de las desgracias actuales proceden de esos dos gobiernos demócratas: una determinación clara de impedir el expansionismo soviético probablemente habría impedido la invasión de Afganistán, de la que surgió una guerra que todavía no termina, y tal vez también se habría podido impedir el asesinato de un tercio de la población de Camboya a manos de los iluminados de la izquierda democrática local (la cual refundó el país con el nombre de Kampuchea Democrática). Incluso el triunfo sandinista podría haber contado con menos apoyo estadounidense y haber incluido la exigencia de elecciones libres. La desmoralización estadounidense tras ese gobierno determinó la política resuelta de su sucesor, Ronald Reagan. Del mismo modo, el frívolo desasimiento de Clinton permitió el asesinato de un millón de personas en Ruanda, así como la agresión de Milosevich contra los kosovares. Los mismos islamistas que destruyeron las torres gemelas el 11 de septiembre de 2001 se encontraron con un gobierno “buenista” que no hizo nada después de la destrucción de un buque de mil millones de dólares. Sin ir más lejos, los colombianos podemos recordar las conversaciones de representantes de ese gobierno con las FARC en Costa Rica y las presiones para que se despejara territorio en el Caguán.

Esperanzas audaces
Más que en el entusiasmo que puedan mostrar por Obama, los progres son muy elocuentes en el desprecio que muestran por sus adversarios, McCain y Palin. En busca de elementos de propaganda no vacilaron en dar a entender que McCain no sabía quién era el presidente español. Más recientemente, el órgano principal de la progresía hispánica, El País, se lucía con este
titular:

Palin dice que Chávez es un dictador y amenaza con sancionar a Venezuela


¿Es que Chávez no es un dictador? ¿Es que en Venezuela hay división de poderes y contrapesos al poder y organismos de control independientes y respeto de la oposición y de las urnas? Si uno atiende a la grotesca y delincuencial oposición colombiana, las cosas son así: es en Colombia donde hay una dictadura porque se supone que se vigila a un asesino jubilado que ayudó a fugarse al país vecino a un coronel espía. En Venezuela, como en el Chile de Allende, hay una democracia respetable. Pero los redactores de El País en apariencia se dirigen a un público menos propenso a acolitar prodigios como la industria del secuestro, sólo que ¿cuál es la gracia entonces de que Chávez sea un dictador? ¿Qué dirán de una noticia como ésta?:

Chávez anuncia que no enviará dinero a las gobernaciones donde gane la oposición


Todos esperan un gobierno de Obama que sea complaciente con esas democracias tan particulares que han florecido en Sudamérica, y la verdad es que en caso de ganar es perfectamente posible que Obama obre tal como esperan sus partidarios fuera de EE UU. El cinismo con que habla de los sindicalistas colombianos muestra que es alguien perfectamente capaz de aliarse con criminales para imponer su bandería.

El voto hispano
Se dice que unos diez millones de hispanos pueden votar en las próximas elecciones, y su decisión puede ser definitiva en estados como Florida. Por una parte, los tienta la retórica “inclusiva” de Obama (que de todos modos defendía el muro entre México y EE UU para proteger a los inmigrantes de insolaciones), pero por la otra deberían tener en cuenta el anhelo de impedir el TLC con Colombia y de renegociar el TLCAN. La posibilidad de que haya un gobierno estadounidense hostil ante Uribe y complaciente con Chávez y sus aliados debería ponerlos a pensar, pues las ambiciones expansionistas del mico no cesarán, y si no han encontrado ninguna resistencia con Bush, menos la van a encontrar con quien se muestra dispuesto a escucharlo. Ni hablar de lo que se resentirá la paz del mundo cuando todos los amigos del multilateralismo (es decir, del poder de Ahmadineyad, Putin, Lukashenko, Chávez, Bin Laden y Kim Jong-il) se sientan envalentonados. Pero será una experiencia que cada cual se merecerá, como los venezolanos que eligieron varias veces al mico.

Por Jaime Ruiz. Columnista de Atrabilioso.

1 comentarios:

Atrabilioso dijo...

4 Comments:



At <$Comentarios$>, Anónimo

puuuuuuritita propaganda barata !!!!


At <$Comentarios$>, Anónimo

Juan Carlos:

Jaime: interesante artículo. Pues es cierto que en las elecciones presidenciales de USA nada está dicho en este momento y es posible que cualquiera de los 2 candidatos gane las elecciones. Por un lado Obama le juega al populismo que promete el ¨cambio¨, a sacar propagandas en español, a vender la idea de ¨reforma y transformación¨para su país.
Por otra parte Mccain parece (o da la impresión) de ser menos carísmatico, de saber aprovechar menos los recursos tecnólogicos como Facebook o blogs que su competencia.

Sin embargo me gustaría que aclarara algunos puntos sobre su post. Usted dice en los primeros parrafos que ¨es bastante dificil evaluar el gobierno de Bush.¨ Ud personalmente como lo evaluaría?
Segundo: En realidad revisando en Internet no alcanzaron a morir 1 millon de soldados estadounidenses en la segunda guerra mundial. Las cifras que se manejan son de 500 a 700000 bajas (es decir muertos y heridos) lo cual es sin duda alto pero mucho menor que los 20 millones desperdiciados inhumanamente por la dictadura soviética.

Tercero: Si bien es cierto que una política de contención, hubiera podido evitar tantas masacres y guerras como las que menciona, No es también cierto que el involucrarse demasiado en guerras, es uno de los principales factores de desgaste de los paises que han sido potencias mundiales en algún periodo de la historia, como España, Francia, Inglaterra.

Por ultimo: Podría decirnos por que Mccain sería mejor presidente que Obama? Sin duda
Pero en este momento y para la política interna de Estados Unidos, para que se mantenga como potencia mundial (lo cual es deseable) y económica, quien sería un mejor presidente?

Muchas gracias por su atención

PD. Es en verdad molesto los comentarios anónimos de tantos individuos sin nada mejor que hacer


At <$Comentarios$>, jaime ruiz

Juan Carlos:

La principal desventaja de McCain es la falta de recursos, pues está limitado por haber aceptado la financiación pública mientras que Obama puede gastar varias veces más porque dispone de aportes de particulares, algo que le está prohibido a McCain. Quién sabe qué intereses financian tan copiosamente la campaña de Obama.

A mí el gobierno de Bush me parece más bueno que malo. Ciertamente no perfecto, pero no lo que pintan los enemigos de EE UU. Al respecto siempre se encuentra uno con la cultura colombiana, uno de cuyos principales rasgos es que el diablo hace hostias. Si se piensa en el interés estadounidense, durante el gobierno de Bush se consiguió la caída de uno de los peores criminales de la historia, se impidieron nuevos ataques terroristas contra EE UU y se golpeó severamente el islamismo. Las nuevas tecnologías se desarrollaron como nunca antes y se registró un crecimiento económico mucho mayor que el descenso que se calcula con la crisis actual. El argumento de los antiamericanos en últimas es que Bush provocó las agresiones de Chávez. Se trata de otro fenómeno: el resurgir de las tendencias que habían entrado en receso desde la caída del comunismo. La consideración de esas tendencias sería algo muy extenso, pero en general se trata de fuerzas reaccionarias que ascienden gracias al dominio que ciertos grupos tienen sobre recursos naturales en distintos lugares del globo. Los clérigos chiítas o los "intelectuales" andinos necesitan esa retórica de guerra para mantener el terror y asegurarse el dominio sobre los yacimientos de petróleo.

Sobre las cifras de muertos en la guerra, me dejé llevar por una información leída hace tiempo en la prensa. Tiene razón, no fueron tantos estadounidenses, aunque la cifra de europeos muertos, incluyendo los soviéticos, es mucho mayor que 50 millones.

Acerca del problema de involucrarse en guerras como causa del declive de las potencias, me parece algo muy relativo. Sencillamente, las naciones han vivido en guerra siempre. Cuanto más poderosa es una potencia, más probable es que resulte involucrada en guerras. El no hacerlo sólo significaría permitir el avance de una potencia enemiga. El problema de las guerras es perderlas. En el caso de las grandes guerras europeas se puede decir que a EE UU le convenían porque del desgaste de las grandes potencias surgía mayor su poder, pero ésa sería una actitud cínica y en últimas criminal. La teoría es que las naciones que viven en paz pueden establecer acuerdos, pero siempre surgen por diversos motivos las pretensiones expansionistas basadas en la violencia organizada: es verdad que los británicos y estadounidenses intentaron dominar el Pacífico por muchos motivos, pero quien les hizo la guerra fue la potencia japonesa, no precisamente un pueblo sometido y esclavizado sino una organización militar sumamente agresiva y opresora para sus víctimas.

En términos generales la oposición entre McCain y Obama es la que alude a los valores republicanos (tradicionalistas) versus los demócratas, "renovadores", en el sentido de un estatismo vago, de una serie de proyectos cuyo núcleo lleva consigo la expansión estatal (más impuestos) y el dominio de los grupos profesionales y de las redes que saben sacar provecho de esa expansión. ¿Por qué sería mejor McCain para EE UU? Era lo que intentaba explicar en el post con las conductas ante el TLC con Colombia y el gobierno de Chávez. El gobierno de McCain estaría basado en la firmeza frente a los enemigos de EE UU y en el apoyo a sus aliados, mientras que Obama parece querer formar un frente diverso contra los republicanos, religiosos, conservadores, provincianos, etc. Puede que incluso mostraran reconocimiento a Chávez a cambio de que menguara su retórica agresiva, o que sacrificaran la democracia iraquí a cambio de algún acuerdo con Ahmadineyad.

Debería bastar la adhesión de todos los antiamericanos para dudar de Obama.

Gracias por participar.


At <$Comentarios$>, Anónimo

BRABONEL.

Lo paradogico es que Obama puede perder por el no racismo, es decir, por millones de personas que a la hora de ser interrogados por sus preferencias electorales disen estar dispuestos a votar por el negro para no ser vistos como racistas pero cuando se dirigan a las urnas secretamente votaran por quien creen que es la mejor opcion para su pais. Mccain ataca a Obama llamandolo socialista por sus posturas en el tema economico por su cercania con un ultra izquierdista y sin embargo Oboma no baja en las encuestas como deviera en un pais donde se ve mal repartir la riqueza y cualquier otra postura socialoista, eso es una muestra que hay algo raro en las respuestas a estas, pero el punto mas evidente lo han tenido en los enfrentamientos televisados, es decir en los careos. Para mi Maccain gano en los debates por que hizo ver a Obama como un inesperto pero las encuestas dieron ganador a Obama, lo extraño es que la misma formula no se aplicara cuando la formula de Obama se enfrento a la de Maccian. Ahi no se premio la lejania de Wasinton sino la experiencia, de esa forma Palin fue la perdedora.

El temor que debe tener Colombia si gana Obama no debe ser por la no aprobacion del TLC. Para los democratas sera insostenible seguir con el cuento que el gobierno Colombiano es complice de los asesinatos de los sindicalistas, cada vez mas se empezaran a preguntar si los democratas creen que eso es cierto entonces por que carajos no rompen relaciones con un Pais paria. Los democratas no son tan idiotas y tendran que aprobar el TLC con Colombia asi los sindicatos y otros sectores de izquierda lloren y braven. El temor tendra que venir por las restriciones en la ayuda militar y en la poca importancia que le dara ese supuesto gobierno a la importancia extrategica que se ganado Colombia y que los Republicanos si saben valorar. Una posicion muy veneficiosa para el Pais en todos los sentidos.