miércoles, 10 de diciembre de 2008

Referendo, reelección y reencauche

Tienen razón los que critican el dilatadísimo proceso de convocatoria de un referéndum que permitiría a Uribe presentarse a la presidencia una tercera vez. ¿Cuál es la tarea de los legisladores y de los líderes políticos que supuestamente representan a la mayoría? Uno espera que contribuyan a administrar bien el país y cree que ése es el sentido de sus cargos y de sus sueldos, pero no hace falta ser muy receloso para llegar a la conclusión de que sólo piensan en asegurarse el nombramiento y no en lo que hacen una vez lo obtienen.

Se trata de un juego político mezquino e innoble, y su principal causa es la absoluta falta de alternativa. Los pasos de la mayoría del Congreso y de los políticos que acompañan al presidente son tan desafortunados como los de quien tuviera unos zapatos varios números mayores que su talla. Las reglas democráticas suponen unos competidores que buscan el favor de los votantes con propuestas que les pueden resultar atractivas, y en esa competencia cada grupo encuentra sus límites y ajusta sus pretensiones. Pero las condiciones de la oposición y el contexto internacional determinan que eso no se dé: lo que da legitimidad al gobierno es la sensatez de sus presupuestos (seguridad democrática, confianza inversionista y cohesión social), mientras que las propuestas de la oposición, enmascaradas con muchos pretextos deplorables, consisten en premiar a los terroristas y aliarse con Chávez.

Lógicamente, todos los políticos desearían ganarse el favor de los votantes representando sus aspiraciones, pero lo que se ha demostrado desde 2002, al menos, es que nadie se atreve a estar realmente en contra de Piedad Córdoba y Carlos Gaviria sin resultar estigmatizado y perseguido por los grupos de oposición, y de algún modo impedido para competir con el uribismo. Cada vez que un político o un grupo tienen que escoger entre su animadversión a Chávez y las FARC y su animadversión a Uribe, fatalmente, optan por lo segundo. Sería interesante preguntarse por la causa de eso.

Arriesgando una interpretación que ya me resulta más bien rutinaria, señalaré que se trata de “poderes fácticos”, de inercias, de una forma de persistir el viejo orden de castas que termina forzando la adhesión tanto al totalitarismo como a las bandas de asesinos que intentan imponerlo. Quien se proclame hostil a Chávez y condene sin paliativos a sus socios colombianos, tanto de Armani como de camuflado, tendrá automáticamente en contra a los amigos de García Márquez y de Santos Calderón, a los empleados estatales (cuya prosperidad es en gran medida el triunfo de tantos años de lucha de unos tristes rústicos remotos), a los usufructuarios de las universidades públicas (cuya tranquila misión también es fruto de esa lucha)... En resumen, a todas las clases herederas del mando en el orden tradicional.

Por eso es tan llamativo que César Gaviria sea incapaz de romper con la senadora que elogia a Tirofijo o Pastrana con los Vivero Paniza y demás corresponsales de Raúl Reyes. Por eso Mockus no denuncia las infinitas muestras de complicidad del PDA con las guerrillas ni desaprueba que quien encabezaba sus listas al Congreso firme la carta de Piedad Córdoba a las FARC, y en cambio se luce pidiendo la renuncia del presidente por el absurdo escándalo de Yidis Medina. Por eso la prensa supuestamente afín al Partido Conservador recita la misma propaganda de los medios de Santodomingo y demás. En definitiva hay unos títulos de propiedad (por ejemplo, sobre los medios de comunicación) y los tienen los que apostaron por imponer un nuevo orden legal aliándose con las FARC. Tendrían que nacer otra vez para encarnar la aspiración de la mayoría de los colombianos de acabar con esa guerra por el método obvio de negarse a premiar a quienes la hacen.

Esa inexistencia de una oposición leal a la democracia (es decir, opuesta a aceptar imposiciones de bandas criminales) es el mayor problema político que hay hoy en día en Colombia. Y también el mayor problema intelectual. Al no haber propuestas que no pasen por la alianza con los chavistas (y el reconocimiento de sus ONG y de las diversas instancias de poder que ostentan) y con las demás redes clientelistas, todo el ejercicio de oposición es la calumnia constante (tan rutinaria que realmente influyó en el retraso con que se hizo frente a los asesinatos de personas inocentes que se cometían para mostrar bajas guerrilleras), la explotación de cualquier circunstancia que genere descontento (al tiempo que se muestra respaldo a los agraviados de las pirámides que exigen que las dejen funcionar, se culpa al gobierno por no haberlas cerrado antes, al tiempo que se despotrica del TLC se critican los aranceles agrícolas, etc.) y la esperanza de que los intereses locales del nuevo gobierno estadounidense se traduzcan en un respiro para las FARC y una deslegitimación del gobierno.

Bueno: el último recurso de propaganda es el referéndum y la reelección. ¡De repente todos los que iban al Caguán a negociar el futuro del país con Tirofijo resultan los más escrupulosos defensores de las formas democráticas! Ciertamente no es nada nuevo, ¿o alguien oyó alguna vez que algún magistrado de alguna alta corte pensara en suprimir el despeje? Sencillamente el orden legal surgido de la Constitución del 91 había llegado a tal punto que el secuestro y el asesinato en masa eran legales y una forma eficaz, correcta y respetable de aspirar a los cargos públicos. De esa costumbre y de ese país les vienen a los opositores sus aires de demócratas exigentes.

Pero por tal pasan ante gente de otros países o gente que no recuerda todo lo que pasó hace una década. Y la verdad es que el peor efecto de la campaña del referendo y la reelección es ése, que esa gente resulte legitimada. Que en lugar de una mayoría social deseosa de vivir en un país ordenado y libre enfrentada a una minoría de herederos del esclavismo y socios de la industria del secuestro resulte haber una muchedumbre confundida que sólo acierta a reconocer a su caudillo, el cual sólo escucha a su camarilla próxima o a los caciques políticos cuyas redes de corruptelas le aseguren la gobernabilidad. Y que por cuenta de todo eso la minoría parásita que desde hace décadas usufructúa los asesinatos que cometen las tropas de niños sometidos a la secta totalitaria se pueda presentar como defensora de las formas que en cualquier parte definen a la democracia.

Por Jaime Ruiz. Columnista de Atrabilioso.

1 comentarios:

Atrabilioso dijo...

11 Comments:



At <$Comentarios$>, Anónimo

Ala no entiendo..... apoyas o no el referendo y la rereelección?

El referendo fue conseguido con dineros de dudosa procedencia y la rere es lo que hablas del caudillo, pero no queda claro.

No quiero pensar que en este chuzo no respaldan la rere o el REferendo.... ahí si, se le voltiaron al mesias hasta los mas furibundos.


At <$Comentarios$>, Atrabilioso

Desde hace casi un año he manifestado mi desacuerdo con el referendo y la reelección.

No creo que sea el camino, ni lo más conveniente para el país.

Lo importante sería que Uribe se decidiera de una buena vez y dejara la ambiguedad con un tema que evidentemente está complicando la gobernabilidad.


At <$Comentarios$>, Noájida

Quisiera en este momento que este artículo tuviera una alta difusión, es que tiene muy buenos datos, esta vez usted don Jaime, puso su intelecto en una perspectiva altamente visionaria,
Los columnistas colombianos son miopes, por no decir que carecen de algun asomo de sentido, hablar de la coyuntura, lo hacen indigentes recicladores, tal como lo presencié el dia anterior , acerca de las pirámides, y es lo que ve uno en eltiempo y los demás.

tal como demuestra el comentarista anterior, importa si esta uno o no con el referendo, si es uribista o no lo es, son tan monocromáticos, que se podrían llamar todos garcía-marquez o alvaro-uribe.

Para mi la pregunta que usted formula acerca de donde estaban las cortes cuando la payasada del caguán, resume la historia de este pais, y debiera ser impresa en una credencial para regalar de aguinaldo, porque a nada se parecen mas que a los solapados que reparten abrazos a diestra y siniestra por estas fechas. Gracias


At <$Comentarios$>, Anónimo

Claudia López se fue a Washington a pedirle al nuevo gobierno de los Estados Unidos que no sigan apoyando la lucha contra el terrorismo en Colombia ¿cuales son los argumentos que lleva la guerrillera de escritorio? Supuestos falsos positivos y el tema de la parapolitica. Claudia López no dirá que la mayoría de personas involucradas con las AUC pertenecieron a la tolda de Samper y Serpa y que se movieron a última hora al Uribismo por mero tino electoral. Tampoco dirá que a muchos del hoy culpados se les prefabricaron pruebas por la CSJ y que muchos testigos han sido pagados además de ofrecerles asilo político por parte de la oposición, nombremos un solo caso: Rafael García por parte del PDA.

Es claro que la oposición solo le apuesta al fortalecimiento de las FARC y el ELN y lastimosamente el Gobierno les da combustible que logra encubrir su verdadero propósito con el tema de la reelección y la falta de claridad para organizar una colectividad que el pueblo perciba limpia sin ningún compromiso politiquero. Pero no solo la oposición esta aprovechando el descuido y la falta de iniciativa de las verdaderas fuerzas Uribistas. Vargas Lleras ya pico en punto y todo parece indicar que terminara fusionado con el PL para organizar una coalición que lo pueda llevar a la Casa de Nariño.

Será muy difícil que alguien se dedique a acusar a los terroristas intelectuales que permutan en los grandes centros Urbanos y que manejan muchos medios. Una de las razones es por que esas personas tienen muchos burladeros y aunque sea cierto que los colombianos cada vez toleran menos las justificaciones al terrorismo todavía conservan aparatos de presión como para amedentrar a alguien que tenga ambiciones políticas, pero es innegable que en el tiempo los espacios se les iran reduciendo y tendrán que buscar un reencauche que les asegure su sobre vivencia.


At <$Comentarios$>, jaime ruiz

Anónimo 8.05 AM. La verdad, usted no quiere entender, como no quiere evaluar nada de la política pues sólo recurre a sus lealtades personales. ¡Ya sabe lo que piensan los demás!

Lástima que con tanto saber no tenga mejor ocurrencia que sabotear las discusiones ajenas.


At <$Comentarios$>, jaime ruiz

Atrabilioso: también yo había publicado aquí un rechazo a la segunda reelección. Estamos en sintonía.


At <$Comentarios$>, jaime ruiz

Noájida: gracias por su reconocimiento. Es importante que todos sepamos eludir las trampas de los socios del crimen. En este caso, la absurda falacia de que por estar en contra de la reelección se les va a perdonar la Ley 002 que tan unánimemente reconocieron y aun cobraron. Es como si un día la gente se escandalizara con la participación en política de Pablo Escobar y escogiera a Alfredo Garavito.


At <$Comentarios$>, jaime ruiz

Anónimo 10.39.

Completamente de acuerdo.


At <$Comentarios$>, Anónimo

"Vistan" el referendo como una cosa que atrae la atención pero apartada para el juego sucio de la política; algo así como camuflar civiles y pasarlos como guerrilleros; se premia y luego se investiga.

Es que el narcotráfico hace 6 años está en la casa de nariño.


At <$Comentarios$>, Noájida

El anónimo de laas 11.50 me recuerda mucho a los colombianos de bien, que sacuden la cabeza con indignación, por la inmoralidad de la sociedad, por la falta de valores, pero orgullosos narran sus gestas , como cuando lograron sobornar aquel agente de tránsito que los cogió tomados, o como le sacaron el doble de lo que valía al carro que ajustado en su kilometraje, aparentaba ser mas "modeludo".

Este anónimo de las 11.50 sabe que vale mas un bulto de tierra de capote, que una hectárea de tierra en el Caquetá, por eso pretende legitimar a los narco-terroristas que "mantienen el orden", en el sur del pais. Cabe aclarar , que las escrituras,las firma timochenko.