viernes, 26 de septiembre de 2008

Actitud científica

Por supuesto que no estoy de acuerdo con las restricciones. Creo que nadie lo está. Los seres humanos reclamamos libertad, y una restricción es ni más ni menos que una limitación a ese ideal de poder hacer todo lo que nuestra mente desea.

Por supuesto también, que nadie puede, mejor dicho “debe”, hacer todo lo que se le antoje; hay principios de convivencia que colocan límites, pero son límites naturales que todos los humanos respetamos salvo casos patológicos.

Ahora, cuando son los seres humanos, gobernantes o no, los que se toman el “atrevimiento” de restringir, prohibir o limitar el uso de algo, automáticamente se genera el disgusto general, entre otras porque siempre habrá excepciones, privilegios que son odiosos, para quienes toman tales medidas y sus amigos.

En una palabra restringir es sinónimo de administrar tardíamente lo que no se supo administrar. Dos casos: el uso de las vías por las distintas categorías de vehículos, y el de las armas.

El DATT, perdón la Alcaldía de Cartagena, expidió un decreto a principio de la semana pasada sobre “pico y placa”, que se anunció de manera tan inusual, que develó algo relativo a su autoría: venía impuesto desde el interior del país. Pero al fin a alguien se le había ocurrido pensar -porque por lo visto no hay mediciones, ni una actitud científica al observar el fenómeno- que los principales causantes de los trancones no son los carros particulares, ni siquiera las motos, sino los buses y los Taxis.

Bastaba observar desde el aire para percibir que el “tropelín” es amarillo; y hacer “un zoom visual” para sorprenderse de verlos deambular vacíos o con un solo ocupante. Este descubrimiento está justificando por si solo, el servicio de Taxis colectivos que se quiere restringir.

Y no es necesario estar en la vía, para detectar que la falta de disciplina de los conductores de Taxis, buses y motos, mas uno que otro particular, producto de una no administración del servicio público, son agravantes del problema. Tan cierto es esto que Transcribe, cuando se termine la obra, no habrá hecho más que facilitar la administración de una vía troncal.

Lo triste –y paradójico- es que los vehículos públicos y las licencias de conducir, son asignados por la autoridad.

Las autoridades, en su mayoría políticos de profesión, deben entender que este es un asunto de “ingeniería de transporte” que debe ser estudiado con actitud científica (las restricciones deben al menos servir para eso), lo cual implica tomar mediciones permanentes, explorar creativamente nuevos experimentos y proponer soluciones. Las restricciones “per se” (que pena Dr. Vergara) no son la solución, sino un simple escenario de estudio; y su prolongación en el tiempo, la confirmación de que se fracasó.

El otro tema de hoy, tiene que ver con las armas. Qué mas quisiera uno que ni siquiera la lengua sea usada como arma de combate, sino como medio de expresión de ideas; pero el hombre por ese afán de dominar, o sobrevivir a costa del otro, se inventó las mortales.

Las autoridades –está visto- no pueden garantizar la vida y bienes de los demás, y ya sabemos en que degeneró la seguridad personal; pero los delincuentes si están armados, de manera que no hay de otra: los que sientan peligro de ser violentados, están en todo su derecho –si tienen además el arrojo- de defenderse.

Por: Miguel Yances Peña. Columnista de El Universal de Cartagena.
myances@msn.com

1 comentarios:

Atrabilioso dijo...

4 Comments:



At <$Comentarios$>, Anónimo

Yances, saludo.

Tengo una preguntica nada cientifica, y nada personal, por lo que me disculpo si la hago aqui, pero no tengo otra fuente.

Sabe el origen de la expresion 'malparido'? es fuerte cuando se piensa en traduccion literal, pero es usada con la frecuencia casi con que algunos respiran. Los dragones la usaban mucho.

Tal vez J Ruiz o Atrabilioso encuentren de donde vien y por que fue usada.

Gracias.

MTR


At <$Comentarios$>, Atrabilioso

MARY T:
La expresión malparido proviene, como su etimología lo demuestra, del señalamiento a las personas que nacían en un parto difícil y quienes eran acusados de ocasionarle un gran dolor a su madre. También entraban en el término los que se demoraban mucho en nacer, con la correspondiente extensión en el tiempo de contracciones, lo que se creía era una premonición de maldad y casi que una predestinación para ocasionar sufrimiento, pues la lógica era que si lo había hecho con la madre, ¿qué se podía esperar con la demás gente?

Posteriormente se amplió el concepto y se consideraba que era un mal parto, no por el fruto, sino por la paridora: los mal paridos eran hijos de mujeres libertinas, adúlteras, sin casarse o cuya ocupación era la prostitución. Entonces, los hijos de aquellas mujeres eran mal paridos, considerándose en aquel tiempo el estigma que tenían que cargar hasta las mujeres que decidían tener un hijo sin casarse.

Aunque no puedo ofrecerle una época precisa, si puede ubicarse más o menos en los periodos del renacimiento, especialmente en los países católicos europeos.


At <$Comentarios$>, ERAGON

Carajo, Todavía nos recuerdan.


At <$Comentarios$>, Anónimo

Atrabilioso,

Eso va con eso de 'si corres te lo pongo y si no, tambien'. Entonces seria una muy mala aplicacion de lo de renacer. Menos mal que la gente hoy en dia da la bienvenida con mejores acciones, a cualquier bebe y se eniende mejor a la mama que lo tuvo con dificultades.

Vamos avanzando, no todo es negativo. Pero quedo el termino, que ya que se aplica a ambos generos solo quedaria el mensaje subliminal por el que ser mas consciente.

Gracias.

MTR