miércoles, 13 de agosto de 2008

Colombia e Irak

A medida que se piensa mucho en una cosa se va llegando a generalizaciones que corresponden más a la filosofía que al examen del fenómeno inicial. Pero la filosofía no es algo que interese de por sí a mucha gente, y a menudo se interpreta como una pérdida de tiempo centrada en la persecución de musarañas que nada tienen que ver con la realidad. Buen ejemplo de esa percepción es la historia del individuo huraño que pide consejo a un amigo sobre lo que podría decirle a una chica que le había concedido una cita: “Háblale de comida, señal de que te interesa su persona y no sólo su cuerpo; pregúntale por la familia, muestra de que tus intenciones son serias, y háblale de filosofía, para que sienta que valoras su inteligencia”. El diálogo con la chica fue así: “¿Te gustan los espaguetis?”. “No.” “Tienes un hermano.” “No”. “Y si tuvieras un hermano, ¿le gustarían los espaguetis?”.

No obstante, hay reflexiones filosóficas que pueden resultarnos útiles para entender lo que nos ocurre; por ejemplo, la antigua pretensión del idealismo de que no ocurre nada fuera de nuestra mente. En India esa idea tuvo mucha influencia, de modo que la corriente principal del hinduismo es el “Vedanta de la no dualidad”, doctrina centrada en la negación de que haya un mundo fuera del sujeto que lo observa. En el budismo la famosa sílaba sagrada “Om” se suele traducir como “Tú eres eso”, de nuevo negando la dualidad mundo-sujeto.

Menos “filosóficamente”, ese pensamiento puede servir para que nos demos cuenta de que una conciencia clara de lo que ocurre es casi una vía de solución. O, en otras palabras, que los problemas que creemos ajenos a nosotros están en realidad dentro y son errores de nuestra concepción. En apariencia eso no es así, el ciudadano corriente no tiene ninguna responsabilidad en que haya bandas de asesinos tratando de imponer una tiranía, pues el mundo en el que él apareció ya contenía eso. Pero podríamos pensar: “En 2008 los colombianos salieron por millones a condenar a las FARC y sus crímenes y a exigir la liberación inmediata y sin condiciones de todos los secuestrados. ¿Por qué eso no ocurrió en 2000, cuando había diez veces más secuestros y la amenaza de la banda era más temible?”. Hubo un cambio en la conciencia tan importante como el cambio en la realidad. Pero el cambio en la realidad también fue fruto del formidable cambio de conciencia que presenciamos en 2001.

Hay otro ejemplo que ilustra eso: los daneses que venden camisetas de las FARC y recaudan dinero para apoyar a esa banda. El colombiano corriente los ve como a unos incomprensibles malvados sin detenerse a considerar su situación. Para un escandinavo joven un país como Colombia es encantador, la mayoría de la gente le muestra su aprobación, particularmente la del sexo opuesto, y sus opiniones siempre resultan más valoradas que las locales. Cuando observa la miseria le parece que es el resultado de un sistema de opresión que fácilmente atribuye al gobierno vigente y a la democracia y no a un orden de castas que es precisamente el que defienden las guerrillas (el caso de la persecución política emprendida por la CSJ es paradigmático). Ni hablar de la facilidad con que se atribuye toda esa desgracia a los estadounidenses, la clase de rubios que cuentan con muchas más oportunidades que ellos (salvo la de ser aprobados por los colombianos). ¿Los daneses? ¿Qué piensan los colombianos de la causas de la miseria y del atraso?, ¿y de lo que realmente defienden las guerrillas?, ¿y de los estadounidenses? Los daneses amigos de las FARC sólo reproducen ideas que han prevalecido durante muchas décadas entre los colombianos, al menos entre los que ellos pueden conocer. No son ocurrencias de ellos.

Pero los daneses están muy lejos de poderse identificar con los parientes de un secuestrado, esas personas se convierten en su mente en abstracciones, como lo son en general también para los colombianos urbanos y universitarios (los secuestrados tienden a ser ganaderos, finqueros y empresarios que poco tienen que ver con el mundo relajado de las academias y cafés revolucionarios). La distancia y los vicios morales (vanidad) hacen que el sufrimiento de todas esas personas se desdibuje y se atribuya fácilmente a quienes no quieren rendirse a las pretensiones de los admiradores de los daneses. Pero ¿los daneses?, ¿los universitarios colombianos?

Según se dice, las dos palabras que con más ansiedad quiere la gente oír no son “te quiero”, sino “es benigno”. Es lo que se podría decir de las FARC si se las compara con lo que fue el comunismo triunfante en medio mundo o con lo que fue el régimen de Sadam Husein y la campaña terrorista con la que respondió, aliado con Al-Qaeda, a la deposición del tirano. Benigno: “dicho de una enfermedad, que no reviste gravedad”. Por mucha alharaca que yo haga, no conozco a ningún secuestrado ni a nadie a quien las FARC le hayan matado a un pariente. Sería muy raro que alguien conociera a un iraquí a quien el régimen de Sadam no le hubiera matado a algún pariente. Las personas que murieron a causa de esa tiranía podrían llegar a los dos millones, de los que casi un tercio serían iraníes, caídos en la guerra entre los dos países. Proyectado eso a Colombia y a las FARC, vendría a ser como si los muertos sumaran unos cuatro millones, visto que la población iraquí es como la mitad de la colombiana.

Pero es casi imposible encontrar a un colombiano que no condene la intervención estadounidense que permitió derribar a ese tirano y dar la posibilidad a los iraquíes de elegir a sus gobernantes y disfrutar de derechos básicos. Perdón... ¿Qué he escrito? No quería decir eso: es casi imposible encontrar a un colombiano que no apruebe la campaña de la correspondiente “insurgencia” iraquí contra los iraquíes, que hace de todas las masacres de las FARC un fenómeno benigno. Es más: es raro un colombiano que no lamente el cese de esas masacres. Recuerdo que en la fecha de la invasión se consideraba el apoyo de Uribe una actitud servil justificable por la necesidad de apoyo para combatir a las guerrillas: un juicio de gente que apoyaba al gobierno, no de los amigos del terrorismo.

¿Con qué derecho viene alguien a quejarse de los daneses y su alegre indiferencia respecto al sufrimiento y a lo que piensan y sienten los colombianos, cuando respecto a lo que sufren los iraquíes tiene la misma actitud? Parece que la viuda o el huérfano de Bagdad o Basora fueran distintos al de alguna ciudad colombiana, o que no merecen atención o solidaridad, habida cuenta de que el antiamericanismo eleva socialmente a quien lo profesa. O lo mismo: se atribuye a la intervención, como si la voluntad de los iraquíes de apoyar a su gobierno legítimo, confirmada por una participación electoral que no se ha alcanzado jamás en Colombia, no tuviera que significar nada en comparación con el orgullito de un imbécil del trópico que se siente danés en cuanto exhibe su odio a Bush y en el mundo real, fuera de su mente mezquina y rencorosa, siempre está expuesto a ser víctima de la violencia que esos daneses alientan, ellos sí seguros en su país rico y tranquilo.

Por Jaime Ruiz. Columnista del Sistema Atrabilioso.

1 comentarios:

Atrabilioso dijo...

8 Comments:



At <$Comentarios$>, Anónimo

Bueno el señor Ruiz como de costumbre mezclando la miel con la pomada con el proposito de hacer valedera su opinion.

El señor muy convenientemente "olvida" que la razon de la invacion a Irak por parte de las tropas de Bush no fue para proteger a los iraquies; fue para "evitar que Sadam hiciera uso de las armas de destruccion masiva contra los paises vecinos" Armas que solamente existian en la imaginacion de Bush y sus compinches. Es tanto que el mismo publico americano una vez que este hecho salio a relucir le ha dado al Bush una de la peores calificaciones de aprovacion entre los mandatarios del pais del norte. Entonces no es que los colombianos despreciemos el sufrimiento de los iraquies; lo que sucede es que nos solidarizamos contra las razones falsas que "justificaron" una guerra que a causado muchas mas victimas que las que causo el gobierno del tirano iraqui.


At <$Comentarios$>, jaime ruiz

Es difícil no contestar con desprecio ante "argumentos" como el de este anónimo: ¿cómo que la guerra ha causado muchas más víctimas que los dos millones que causó el tirano? Es en Colombia, cualquier idiotez se puede decir. No importa que sea la mentira más directa. Y la necesidad de quitar ese barril de pólvora reseco del polvorín de la región era urgente. Sencillamente hay un bando fariano que no tiene modo de hablar a favor de sus aspiraciones y se ilusiona justificando el terrorismo masivo contra el pueblo y la tiranía basándose en que los demás les creerán porque no les duele.

Lástima que no se pueda restituir a Sadam, porque es evidente que el hecho de que la gente pueda elegir a sus gobernantes les escuece a muchos.


At <$Comentarios$>, Anónimo

Para el señor Ruiz es algo comun contestar con desprecio; pues es su mayor y parece que unico sentimiento. El desprecio por todo aquel que se "atreve" a no estar de acuerdo con sus barrabazadas. Cuantos iraquies han muerto desde que comenzo la invacion? Nadie sabe con certeza.


La cifra de 2 millones de muertos durante el regimen del tirano incluyen las bajas sufridas por el ejercito iraqui durante la guerra con Iran, la cual duro 5 años, lo cual usted convenientemente ignora en sus clarioscuras afirmaciones para probar sus torcidas opiniones
Y ademas cree usted en su "inmensa sabiduria" que si Irak no fuese el sitio de esos enormes depositos de petroleo hubiese habido la famosa invasion? Las acciones del tirano no hubiesen sido de mucha incumbencia para la mayoria del mundo. Tal como sucedio con la tragica "limpieza etnica" de los 90 en la desaparecida Yugoeslavia.

Algo mas, para su informacion no tengo nada de fariano, muy por el contrario detesto las doctrinas y metodos de esos criminales. Soy muy independiente en mi pensamiento, simplemente no trago entero sin importarme de donde venga la informacion. Como la famosa escusa de las armas de destruccion masiva. Es tanto que ese ha sido un tema del posible "impeachment" o destitucion de su admirado Bush. Lo unico que lo salvara es el corto tiempo que le queda en el poder.

Es muy dificil ser imparcial y objetivo cuando alguien tiene un ego mas grande que el mundo y una opinion de autoimportancia ilimitada; algo que es muy comun entre seres acomplejados por motivos muy personales y siempre se trata de sobrecompensar tratando de hacer lucir a los demas como ridiculos o ignorantes. Les suena esto como algo familiar a los lectores?


At <$Comentarios$>, Anónimo

CADA VEZ MAS LA POBLACION Colombiana se va concientisando del sufrimiento de los demás. Antes no les importaba las victimas de las guerrillas por que sino eran ricos hacendados o comerciantes eran campesinos o pueblerinos infelices que Vivian en lugares lejanos para los que habitaban los grandes centros urbanos. La indiferencia por el sufrimiento ajeno llego a su punto y hoy ese mismo sufrimiento es intolerable a quien se le propinen no importando su condición social o cualquier otra. Mañana talvez la misma gente que se levanto en contra de la guerrilla lo haga contra todos los tiranos del Mundo, donde tendrán que aparecer inevitablemente Fidel Castro.

Existe un escritor Colombiano que es muy criticado por las posiciones que toma y por su baja moral (Fernando Vallejo) pero se le debe reconocer que en cada libro que escribe deja en evidencia el sufrimiento que es capaz de crear la raza humana. Fernando Vallejo con su sarcasmo fino y su forma directa de decir las cosas pone a reflexionar hasta al mas convencido de lo humano.


At <$Comentarios$>, jaime ruiz

Anónimo: sí, yo cuento un millón de víctimas de la represión y otro millón de víctimas de la guerra Irán-Irak. Habría que sumar las víctimas causadas por la tiranía criminal en alianza con Al-Qaeda después de la intervención. Fuera de eso y de acciones de resistencia casi no hay bajas ocasionadas por las fuerzas extranjeras y el gobierno legítimo iraquí.

Las armas de destrucción masiva eran una aspiración continua de Sadam Husein, que las poseyó y las usó contra los kurdos y que se resistió todo lo que pudo a dejar operar a los inspectores. Eran un perfecto recurso para asustar al mundo mientras las obtenía de verdad, convencido de que nadie se metería con él porque en EE UU había síndrome de Vietnam y en el resto de los países resentimiento y complejo de inferioridad (no me estoy refiriendo a nadie en particular) respecto a la superpotencia. Acerca de si había o no había armas de destrucción masiva y de si se sabía o no, le recomiendo por ejemplo leer lo que dice el filósofo francés André Glucksmann.

Hay que creerle a usted cuando se declara enemigo de las FARC, sólo que curiosamente está, respecto de Irak, en el mismo bando de los farianos. Y es que la rebelión de esos criminales surge de opiniones como las suyas, de ese rechazo inexplicable a la posibilidad de que la gente escoja a sus gobernantes y pueda disponer de las riquezas de su país (cosa que no ocurría con Sadam como no ocurre con Chávez, modelo del antiamericanismo de la región). La guerra de Irak es un pretexto para que afloren esos sentimientos, ciertamente reforzados por la propaganda de la prensa (que al no poder condenar a EE UU por tener libertades llega al escándalo de condenar a google por colaborar con la censura china, al mismo tiempo que defiende al régimen cubano, en el que la censura consiste en que nadie puede entrar libremente a internet).

En fin: sus certezas sobre Irak son grotescas, el cuento de que se intervino porque había petróleo es una obviedad, pero no se parece a la antigua Yugoslavia, donde los europeos protegieron cada uno a su bando y los rusos a Milosevich y sólo después de muchos excesos hicieron los estadounidenses algo, A PESAR DE LA OPOSICIÓN DE LAS PERSONAS COMO USTED.

Los iraquíes van saliendo y van adquiriendo poco a poco derechos, libertades y acceso al bienestar. Puede que el día en que vivan bien se acuerden de todos los que defendieron al sátrapa y sus monstruosidades y alentaron a los terroristas que tantos asesinatos produjeron. Pero por entonces esas personas habrán encontrado otro pretexto para promover la iniquidad en el mundo: eso es todo lo que producen sus almas pequeñas y rencorosas.


At <$Comentarios$>, Anónimo

Es obvio que usted no puede evitar mostrar su conviccion de ser el unico poseedor de la verdad. Siempre asumiendo con "certeza" que sabe como y que piensan los demas. Para su sorpresa el dueño de esta pequeña y rencorosa alma, segun su excelencia, no tiene convicciones antiamericanas como usted con tanta seguridad afirma. Muy por el contrario admiro muchas de las cualidades de esa cultura. Pero una vez mas, "no como entero".
No entiendo como alguien con una mente tan "brillante" como la suya aun dude de si habia o no, o si se sabia o no acerca de las "famosas armas de destruccion masiva". No ha podido darse cuenta que si Saddam hubiese tenido al menos una pequeña pero poderosa bomba, lo primero que hubiera hecho hubiese sido colocarla dentro de sus fronteras lo mas cerca a Israel posible; para al primer indicio de una invacion superanunciada lanzarla sobre Tel-Aviv. Esta es la prueba mas obvia que el tirano no poseia en el momento ninguna arma de alto poder, a ese individuo no le temblaba la mano para cometer cualquier atrocidad.

Usted señor muestra tener la conviccion de que alguien o esta completamente correcto o completamente equivocado, y esa, "camarada" es la marca de los totalitaristas.
Y solo me dan ganas de reir al leer el ultimo parrafo de su respuesta. Ya quisiera yo tener una millonesima del poder de influencia para haber detenido al gobierno americano de tomar cualquier decicion. Muy opuesto a lo que usted afirma una de mis mayores frustraciones en ese tiempo era el ver la inaccion por parte de Clinton ante las atrocidades cometidas en Yugoeslavia. Usted señor continua tacando burro con sus arrogantes suposiciones.
Yo, señor tengo una ideologia basada en el respeto por la democracia y aborresco todo lo que envuelva abuso, por eso no mis opiniones no defienden a ningun gobierno, institucion o individuo cuando abusan de su poder, pero eso para usted sera algo muy dificil de entender pues su actitud es la del total convencimiento de que no hay lugar para el compromiso. O es blanco o es negro.


At <$Comentarios$>, DieGoth

Me salgo un poquito del tema, pero encontré un comentario sobre la CSJ que me parece interesante para analizarlo:

"Comentario nº 64
Édgar Francisco Bermúdez Mojica (Colombia) ha respondido a la publicación de Miguelhace 32 minutos
Yo sé porqué está actuando así la CSJusticia: resulta y acontece que la mayoría de los magistrados son o provienen de ASONAL JUDICIAL, el sindicato de la Rama Judicial, muy influenciado por el socialismo rojo-rojito.

La entidad fundadora de ASONAL JUDICIAL es el Partido Comunista Colombiano que, a su vez, es fundador y columna vertebral del Polo ¿Democrático? Alternativo. A su vez el Partido Comunista Colombiano es fundador también de las FARC.

Ello explica la parcialización de los magistrados."


At <$Comentarios$>, jaime ruiz

Anónimo: parece que la embarré atribuyéndole a usted las típicas inclinaciones de los nostálgicos de Sadam, pero eso no aclara nada sobre la cuestión de Irak: la misma indiferencia ante el sufrimiento y la opresión de los iraquíes que manifiestan los daneses que menciono en mi post. No, la gente estaba sometida a un régimen criminal dedicado al asesinato, hoy es responsable del gobierno que elija; ese régimen estaba pendiente de hacerse temer mediante la provocación, incluso encargó el asesinato de George Bush I, y en cualquier momento habría provocado otra guerra, otra matanza, etc. Como ocurrirá con Chávez.

No sé cuántos testimonios de iraquíes conocerá usted, pero tenga por seguro que nadie echa de menos el régimen de Sadam, aparte de la minoría de opresores. Casi todo igual que en Colombia, sólo que en Colombia la minoría de opresores es la que lee la prensa.